Ayer, Otegi donde Évole dijo, entre otras muchas infamias, ésta:
"Hay gente que me ha dicho que la estrategia (de paz) es absolutamente equivocada, que Cataluña demuestra que no existen vías democráticas para lograr nuestros objetivos."
Cataluña, el contraejemplo para los violentos. La prueba de que sólo matando se resuelven las cosas. Que la vía catalana no lleva a nada.
Pero Otegi no quiere eso, al menos ahora ya no lo quiere, porque Otegi es ahora un hombre de paz, comparado con esa "gente" que no cree en "la estrategia de paz".
A la pregunta de por qué no condena la violencia, Otegi contestó esto:
"porque condenar sería interpretado por algunos sectores abertzales como una humillación. Que te han ganado, que te has humillado, te estás bajando los pantalones".
El eterno machismo del terror (que practican muchas mujeres abertzales también, por supuesto)
Pero sobre todo ya se ve quién sigue mandando en el nacionalismo vasco y quién tutela el proceso del asalto al poder por las urnas. Los "algunos sectores abertzales".