viernes, 3 de junio de 2016

Rajoy funcionando

Rajoy en el telediario de la noche de TVE (en otro tiempo, el momento de oro societal de máximo share; hoy una caquita de jilguero en el paisaje de los medios españoles): "Si se dan los mismos resultados, adoptaré la misma postura...".
No ha contestado a Ana Blanco nada que no supiéramos que iba a contestarle.

Nada más previsible y aburrido que un Rajoy funcionando, en funciones, carburando.
Y, sin embargo, con el viento en popa.  Retomando la curva ascendente que se truncó el 20-D, contra viento y marea de chapapote corrupto: 123. 125. 128. 130, y subiendo.
Ay, la salutífera serenidad que imbuye a este hombre tan previsible que optó por no moverse en cuatro meses, mientras todos se lo afeaban, y dejó que los demás idiotas hicieran el gasto de ruido y furia.

El 26-J se parece cada vez a una cena de los idiotas a base de "I like" en que hay tres candidatos que pueden quedarse con la orejas de burro.

La cuestión no es quién ganará las elecciones, sino quién será la oposición y en qué posición se ordenará ésta para que no gobierne el PP o sí gobierne.




Hasta nunca, Europa

Puigdemont fue el otro día a la Fundación Ortega-Marañón a vender el falso pactismo catalán y un aún más falso europeísmo de estos nacionalistas excluyentes y anticonvivenciales.

Toledo, mujer de lei, lo cuenta aquí, en una abierta defensa de la Constitución a la que le canta, machadiana ella, como a todo lo que se pierde.

Se esperan grandes minorías el 21 de junio en el Teatro Calderón para entonar cánticos en dueto.


N.B.

Puigdemont parece que dijo en la Fundación que si España no lo escucha le diría, y lo dijo  en su mal francés: "Au revoir (l') Espagne!", cuando debió haber dicho, par la même occasion:
"Adieu* l'Europe".



* "Absolument et figurément, "adieu" exprime la disparition, la perte." (Dictionnaire Littré)