domingo, 22 de mayo de 2016

El sudoku español

Empiezan las encuestas en serio.
Aquí.

Veámoslas:
Tal como se dejó apuntado hace semanas en este blog, la boda de Podemos e IU desmiente el declive de Podemos que vaticinaban todas las últimas encuestas.
Que el PP ganará las elecciones con mucha ventaja respecto al segundo no era un misterio para nadie: la fidelidad de su suelo es granítica y a prueba de corrupción masiva.
El que mejore los resultados de diciembre es lógico en la medida en que ahora sí debería darse un voto útil y del miedo en su favor: el riesgo de que Podemos entre en un Gobierno llamado de "progreso" es muy alto; hoy más que ayer,
El PSOE, salvo sorpresa de última hora para propios y extraños, empeorará; otro resultado "histórico". Queda por saberse si a pesar de ello tendrá más escaños (que no votos) que la coalición de extrema izquierda y cómo hará valer y negociará su derrota y sus escaños.
C's parece que ve ligeramente premiada su comportamiento pactista de estos meses de negociaciones, pero esto es, me temo, un espejismo: el desfase entre las expectativas en los sondeos y los resultados reales es siempre más llamativo para C's, entre los cuatro partidos en liza, y más bien  creo que perderá escaños respecto a Navidad, porque parte de su electorado, que venía del PP volverá al PP, por el ya mencionado efecto útil y miedoso.

Así las cosas, con estos datos, se darían estos tres posibles bloques de a dos:

PP + C's: 45%
PIUdemos y PSOE: 43%
PSOE + C'S: 35%


Pero si, además, aplicamos el factor corrector a la baja en C's, volveríamos el empate virtual de diciembre en que dos fuerzas solas no suman para gobernar.

Dado que se descarta en estos momentos una gran coalición PP + PSOE (que sumaría 50% de votos; y 65% con C's),  la clave la tendrán los partidos nacionalistas, una vez más, con su posible apoyo o abstención: PNV, ERC, Convergència...

El sudoku está servido.

Se dirá que todo esto son castillos en el aire que se cimientan en una participación estimada de sólo el 69%. Cierto. En función de la mayor o menor abstención, hay 10,  15 o 20 escaños que podrían cambiar de color deshaciendo el empate eterno en uno u otro sentido.


P.S.

Si PSOE y C's hubieran sido coherentes en su error, y sobre la base de su fallido pacto se hubieran presentado en coalición esta vez, no sólo serían el 26-J la primera fuerza en el Parlamento con el 35% de los votos y 130 escaños, sino que ello obligaría esta vez o al PP o a PIUdemos al menos a abstenerse para dejarlos gobernar... ante el riesgo de que esta vez el rey nombrase a un formador de gobierno independiente, que tuviera la encomienda de elaborar un gabinete de ministros técnicos surgidos básicamente de estas dos formaciones de centro y centro izquierda. Esto es algo mortal de necesidad para el PP y para Podemos, con lo cual, dejar gobernar en minoría a PSOE-C's sería un mal menor para ellos y, de paso, para todos los españoles.




Tercio triunfante

El 68% del 53% (es decir uno de cada tres, más o menos) de todos los afiliados que se han tomado la molestia de ir a votar, quieren que Convergència cambie de nombre.
Creen que muerto el nombre, muerta la rabia.
Aquí.

14 mil militantes han decidido refundarse para que el partido vuelva a ser el pal de paller del catalanismo ahora ya irreversiblemente independentista.

Puro batasunismo onomástico.