Tardà de ERC hace una intervención grotesca, grandilocuente, pedantesca, un sketch as usual. Él a lo suyo. "El elefante y el problema catalán" del chiste.
Y ha avisado de que al Elefante no lo va a parar ni la madre que lo parió. Y ha sembrado el hemicirco de boñigas, muy propio.
Tardà es un energúmeno, y lo sabe. Y disfruta siéndolo. El hooligan rural. El poli campestre malo. Luego vendrá el bueno, convergente.