No hay que ser un (falso) persa de Montesquieu para poder interesarse por cómo lo ven los vecinos.
The Guardian lo ve de este modo, por ejemplo.
Aquí.
Y aquí en tradu exprés.
" Cataluña votará la
independencia a pesar del enfado de Madrid
El Gobierno español ha acusado al Parlamento catalán de
haber cometido una "atropello constitucional y democrático" al
aprobar una legislación que permite celebrar el duramente disputado referéndum
el próximo mes.
Este miércoles por la noche, la coalición gobernante y pro
soberanista de la región -que tiene mayoría en el Parlamento catalán- logró que
se aprobara la ley de referéndum a pesar de las airadas objeciones de los
diputados de la oposición, quejosos de que se habían ignorado los
procedimientos parlamentarios habituales.
La ley fue aprobada en Barcelona por 72 votos después de que
52 diputados de la oposición saliesen en protesta de la Cámara al final de una
airada sesión de 11 horas.
La medida fue denunciada por el Gobierno español, que una
vez más dijo que haría todo lo posible, legal y políticamente, para impedir que
la votación se produzca el 1 de octubre.
El primer ministro español, Mariano Rajoy, ordenó a los abogados
del ejecutivo a presentar una demanda ante el Tribunal Constitucional para que
se anule la votación.
La fiscalía también anunció que está preparando una querella
contra parlamentarios catalanes -incluida la Presidenta, Carme Forcadell- por
desobedecer las resoluciones judiciales anteriores que prohíben tomar medidas
legislativas en pos de la independencia.
Los separatistas catalanes insisten en que la rica región
del noreste tiene un derecho político, económico y cultural a la
autodeterminación.
Pero Madrid se opone a la independencia, argumentando que es
una violación de la Constitución, y se ha negado a ofrecer un referéndum al
estilo escocés sobre el asunto.
La viceprimera ministra de España, Soraya Sáenz de
Santamaría, calificó la jornada de "bochornosa" y una traición a la
democracia y a la Constitución española.
Añadió que Forcadell y los suyos habían despreciado la ley y
a sus compatriotas al aprobar dicho proyecto de ley, y que Forcadell "no
sabe lo que es o no es una democracia".
Sáenz de Santamaría continuó diciendo que "el Gobierno
defenderá la libertad, la democracia y la convivencia. No vamos a consentir que
la ley se incumpla en España. Que nadie dude de que sabemos lo que tenemos que
hacer y lo haremos”.
Un portavoz del partido centrista Ciudadanos acusó a Forcadell
y otros de convertir el Parlamento en "El Teatro Nacional de Cataluña", mientras que el líder
nacional del partido, Albert Rivera, declaraba que el país estaba viviendo
"un golpe contra la democracia".
Más tarde, el miércoles por la noche, Inés Arrimadas, líder
de Ciudadanos en Cataluña, anunció su intención de presentar una moción de
censura contra el presidente catalán, Carles Puigdemont, para forzar unas nuevas
elecciones autonómicas.
Forcadell, veterana activista por la independencia catalana
y miembro de la coalición gobernante Junts pel Sí, ya arrostra diversas
imputaciones penales por desobedecer al Tribunal Constitucional español en julio del año
pasado al permitir un debate parlamentario sobre una hoja de ruta para la
independencia.
En un tuit del miércoles, anunció que recusaba a los
miembros del Tribunal, argumentando que éstos eran cargos políticos y que como
tales representaban "otra extensión del Estado, que ha perdido toda
legitimidad".
Forcadell es uno de los políticos separatistas catalanes de
mayor rango que ha sido llevado ante la justicia.
En marzo de este año, el ex presidente catalán, Artur Mas,
fue inhabilitado de cargos públicos durante dos años después de ser declarado
culpable de desobedecer al Tribunal Constitucional español por celebrar un
referéndum simbólico de independencia en noviembre de 2014. También fueron condenados , e
inhabilitados temporalmente, la vicepresidenta Joana Ortega y la ex consejera
de Educación Irene Rigau.
El martes, el Tribunal de Cuentas de España ordenó a Mas y a
otras 10 ex autoridades catalanas reembolsar al Estado el coste de 5,1 millones
de euros del mencionado referéndum.
Según una encuesta de finales de julio, el 49,4% de los catalanes
está en contra de la independencia, mientras que el 41,1% lo apoya. Sin
embargo, una encuesta de esta última semana determinó que si el referéndum se
celebra, la campaña sí obtendría el 72% de los votos con una participación del
50%.
El Gobierno catalán no ha fijado un umbral de participación
mínima y ha declarado que la votación será vinculante independientemente del
nivel de participación.
Hace tres meses, Puigdemont anunció que el referéndum se
celebraría el 1 de octubre y que se preguntaría a los votantes: "¿Quiere
que Cataluña sea un país independiente en forma de República?".
Más del 80% de los consultados optó por la independencia en
la consulta de 2014, aunque sólo participaron 2,3 millones de los 5,4 millones
de electores de Cataluña.
El Gobierno catalán insiste en que los resultados de la
votación de octubre serán jurídicamente vinculantes. Si tiene éxito, el Gobierno
regional declarará la independencia de España 48 horas después del resultado que avale la construcción de un
estado soberano.
En un discurso en Madrid el pasado mes de mayo, Puigdemont
dijo que su gobierno tenía un compromiso "democráticamente
inviolable" con el referéndum, y acusó a Rajoy de no hacer nada
"serio, sincero o real" para abordar el tema.
La mayoría de los catalanes está a favor de un referéndum
para resolver la cuestión de la independencia, pero las encuestas sugieren que
están divididos sobre el tema."
Sam Jones
...
Así lo ven los persas de Londres.