Decía el socialista Helmut Shchmidt que "la política no tiene como fin fomentar la felicidad sino evitar el sufrimiento".
Gran frase digna de los presocráticos, por lo menos.
Si el PP lo entendiera sólo un poquito, vería con buenos ojos que PSOE y C's formaran gobierno del cambio gracias a su abstención. A cambio de alguna cosilla, pero tampoco de tanto.
Con 130 diputados representando a 9 millones de votos y un 36% de los votos socialistas y ciudadanos cuentan con legitimidad suficiente para gobernar, siempre que el PP lo vea como un mal menor, a la espera de nuevas elecciones en dos años, por ejemplo, y para evitar un pacto anti PP llamado progresista que podría "helenizar" el país, pero no a la manera presocrática precisamente.
A cambio, el nuevo pacto PSOE +C's podría comprometerse por escrito a convocar elecciones en dos años, tiempo suficiente para que el PP se regenerase y buscara nuevo candidato.
Porque de lo que se trata, en estos momentos, es de evitar sufrimiento justamente; y cualquier otra opción provocaría mayores sufrimientos para el conjunto de españoles, incluidas nuevas eleccione en mayo. Porque hay un golpe de Estado en marcha.
Con ese pacto a tres,para que gobiernen dos, se podría acometer la reforma de la Constitución que requiere de 2/3 y en el ínterin darle al PP la presidencia del Congreso que ahora ocupa López: porque ¿no se trataba de que en la cabeza del Congreso hubiese otro partido que el del gobierno? Con el nuevo modelo, deberían cambiarse esos equilibrios.
Dicen algunos analistas que la situación inextricable para formar alianzas es fruto de la voluntad del pueblo soberano que ha votado.
Es falso, nadie en su sano juicio votó para que se produjera una ingobernabilidad, de facto ni pensando en posibles tripartitos. La gente vota al partido que quisiera ver gobernar. O al menos eso debería hacer.
Es como lo de "Shakira es de todos", el otro día en la grada del Espanyol-Barça
Otra falsedad meramente pancartista.
Qué mas quisieran.