domingo, 5 de marzo de 2017

Viejo no muere el cisne (si es negro)

Trapiello haciendo de guardaagujas.

Aquí.

El trumpazo del tren será antológico, nos dice el mejor autodiarista de España.

En efecto, no hay dos trenes y un choque en perspectiva, hay un solo tren que la liará parda, porque lleva más de 30 años rulando y los últimos cinco sin frenos.

Y enfrente está un señor gallego que no sabe si quiere pasar a la Historia o no, un gestor que tampoco, y Albert Rivera y los suyos, sin  ninguna experiencia de gobierno.

E Iglesias y Sánchez jugando a cuatro bandas y pidiendo negociar.

El independentismo vive horas bajas, dicen los analistas. Será esto de ahora pues el canto del cisne.

Viejo muere el cisne, después de muchos veranos...

Pero el cisne, aquí, es negro.

La secuencia más probable: convocatoria de referéndum, impugnación de la misma, suspensión cautelar del TS, convocatoria de elecciones anticipadas "con carácter referendario", elecciones con una campaña de altísima tensión, elecciones con mayor o menor participación, y proclamación de resultados: si esta vez los tres partidos indepes suman más del 50% de los votos (se quedaron a 2,7%) y más de la mitad de los escaños, proclamación unilateral de la independencia, suspensión de la autonomía por parte de Madrid, plaza Maidan en plaza Cataluña, y llamada al diálogo por parte de la Comunidad internacional, que no se puede permitir una Crimea aunque sea de bolsillo: convocatoria de un forzado referéndum pactado y probable victoria del Sí a la independencia.

Si no consiguen los tres partidos indepes el 50,1% de los votos, la indepe-a-título-personal Colau será la que decida si con los votos de sus diputados apoya un proceso constituyente o no, entra en la Generalitat o no, etc.



Y si entremedias hay sentencias del TSJC y del TS inhabilitando a Mas y a Homs, más cacao pal mono.