sábado, 12 de noviembre de 2016

Bomberos pirómanos

De momento estos tres bomberos para el cambio climático en el equipo de Trump.
Aquí.
El problema no son tanto las mentiras en campaña, pura publicidad engañosa de un trumposo, pero en el fondo marketing amparado en el libérrimo margen de expresión americana, que hasta tolera la apología del asesinato indiscriminado con el que soñaban los surrealistas: "En mitad de la Quinta Avenida podría dispararle a alguien y no perdería votos"; porque el votante piensa: "bueno, dependerá del alguien disparado, que eso sea bueno o malo"; el problema es cuando las mentiras se convierten en políticas, con líneas presupuestarias al efecto.

Los indignados de Trump, en lugar de llorar como boabdiles en la calle lo que no supieron defender en la urna, deberían plantearse otra formas de comportamiento, para evitarse darse más trumpazos.

Por ejemplo, presionar a sus congresistas y senadores para que le apliquen la camisola al presidente electo antes de que tome posesión del cargo, por ejemplo.