Otegi en plan poético-épico, pero las flores de Otegi son, tristemente, crisantemos.
Aquí.
(Neruda fue un buen poeta pero un político muy equivocado)
Conviene que se cumplan las sentencias en España, y Otegi no puede presentarse a lehendakari. Que se quiera usar esto para alentar el independentismo es lógico, pero el Partido Socialista de Euskadi no debería olvidar a sus muertos y su memoria, a la que deben honrar. Aunque la inegilibilidad le suponga más votos a Bildu, Sortu o como quiera llamarse el brazo político de la ETA, el PSE no ha de ponerse de perfil.
La razón democrática ha de imponerse. Por dignidad.