Entre los 16 (!) millones de británicos abroad, los que llevan más de 15 años fuera no pudieron votar. No se le dio el derecho a hacerlo. Los otros exiliados más recientes, tuvieron que coger un avión si querían ir a votar, pues no existe para nadie el voto por correo o consular en el sistema.
La decisión del Brexit afecta, ni que decir tiene, sobremanera a los británicos residentes en la UE.
En España sólo viven 400 mil británicos...
No hay que ser adivino para imaginar cómo habría votado la mayoría de ese colectivo.
Un democracia de muy baja calidad.