lunes, 27 de junio de 2016

¡Qué vedo!

Cuentan del gran poeta satírico Francisco de Quevedo que en cierta ocasión hubo de defecar en una esquina cuando pasaron una madre e hija; la señora exclamóse al ver a un señor con las posaderas al aire: "¡qué vedo!", a lo que el poeta, sorprendido, contestó: "Hasta por el culo me conocen".

Esto es lo que le puede pasar a otro Quevedo, Pedro.
Aquí.
Ya puestos a tener que pasar por el trance, que pida que lo nombren formador de Gobierno.

Madrid capital política de Iberia y norte del Magreb

El influyente FAZ alemán relaciona el fortalecimiento del PP al cisne negro británico.
Hier.
Se sorprende de que mientan los encuestados españoles más que un almanaque zaragozano, sobre todo a pie de urna. Ven a Sánchez en la cuerda floja con el peor resultado para el PSOE en 40 años-sí-es-nada. Y a Podemos muy abatido.Y a Ciudadanos tocado pero no hundido.

El corresponsal político que cubre desde su sede en Madrid toda la península ibérica, Marruecos y Túnez es Leo Wieland:  Politischer Korrespondent für die Iberische Halbinsel, Marokko und Tunesien mit Sitz in Madrid.
No deja de sorprender, incluso a un extranjero profesional como el que escribe estas notas, cómo nos ven desde fuera y en qué universo nos inquiben...

Puro Orientalismus.


Black Swan

Iván Redondo, prediciendo hoy a toro pasado acá lo que cuatros día antes veía bastante distinto aquí. (lo de qué pasaría con una mayor participación a cuenta del Brexit, cisne negro, no tiene pierde)

Es que los cisnes negro sólo lo son a posteriori como dice su descubrir:  Nassim Taleb.

137

Acaba de decir Rivera que no van a apoyar ni por activa ni por pasiva un Gobierno presidido por Rajoy, no sólo porque no quieren a Rajoy de Presidente ni a su ministro del Interior sino porque simplemente porque Rajoy no los necesita a ellos  (entiéndase: ya que no suman ambos partidos lo suficiente. 137+32=169 (siempre habría más "noes"  si suman PSOE-Podem@s-Indepes catalanes= 173 noes!!! Es decir que C's no sirve salvo que vaya también junto al PNV --y a CC, si bien esto no plantea problema--. En ese caso sumarían: 175 síes, pero siempre habría otros 175 noes enfrente. Un empate que solo podría romper un solo "no" convertido en una abstención, ¿pero de quién?)


 Así que C's dice que busque el PP apoyo de otros que sí le serán necesarios (en plata, el PSOE).

Pero Hernández a la misma hora dice lo mismo: "No vamos apoyar a Rajoy para la investidura, ni nos vamos a abstener".

Es como si ambos le dijeran: Señor Rajoy, ¿qué parte de los "solo tiene 137 escaños" no ha entendido?

¿Nuevas elecciones o Gobierno de independientes a palos...?

El abrazo abrasador

La pérdida de votos combinada con una mayor abstención general (que es una forma de censura) le han arrebatado al Pacto del Abrazo 13 escaños, casi los mismos que ha ganado el PP.
No es casual.
Lucía Méndez tiene claro que el castigo que ha sufrido ese pacto de centro izquierda se debe al uso habilísimo del mismo por parte de Rajoy.
Aquí.

Seguramente tiene razón. Y nadie puede discutir que el único que ganó ayer es Rajoy. Y con panache. El espectáculo audio de las conversaciones nauseabundas del ministro del Interior le ha hecho tanto daño como una mosca en el lomo de un elefante. Y el Brexit le ha venido de perilla.

Rajoy abrazó en su día como un oso a Podemos, facilitándole unas nuevas elecciones para intentar il sorpasso,  pero con esa pinza abrasó  al mismo tiempo a los del Pacto del Abrazo.

El Pacto del Abrazo fue un pacto enfático, sobrerepresentado y cursi; pero sobre todo fue suicida, pues no sólo no sumaba y lo fiaba todo a la abstención del PP o de Podemos (que era como pedir peras al horno, sin gas ni electricidad) sino porque se vio enseguida que aquello era una boda exprés y a prueba que iba a durar sólo un par de días, demostrando así el oportunismo y la frivolidad del enlace.
A la gente no le gusta que a los toros te pongas la minifalda pa na.

Sin embargo, de haber concurrido en coalición, haciendo de necesidad virtud y queriendo ser una pareja algo más constante y menos frívola, habrían cosechado casi el 36% de los votos (sobre la base de los obtenidos ayer) y serían con casi toda seguridad la lista ganadora por delante del PP;  y sus escaños serían muy superiores a los 117 que suman ahora (85+ 32), muy probablemente por encima de los escaños que habría obtenido el PP, por obra y gracia del denostado por C's señor D'Hondt.

Habrían sido la primera lista en votos y en escaños y se podrían presentar como el cambio tranquilo, una colación social-liberal europeísta y homologable.

Todo esto se lo llevó por delante el mérito de Rajoy que condujo al huerto a Podemos tentándolo con la segunda plaza; pero también por el demérito de Sánchez e Iglesias que no vieron algo harto evidente y que se ha repetido aquí muchas veces: en unas nuevas elecciones tenían que ir juntos o arriesgarse a salir peor parados.
Como ha sido el caso.


La posibilidad de dos islas

El principal problema de España, que es la independencia de Cataluña ( y del País Vasco si se produjera la primera), sigue en el mismo punto desde ayer.
Aquí.
Los partidos catalanes favorables a un referéndum (quien lo pide siempre está a favor de la independencia, causa sonrojo tener que argumentarlo), sumaron ayer casi el 59% de los votos. (En Comú, ERC y Convergència). La CUP no se presentó, pero su voto queda subsumido en ese bloque.

Los no favorables a un referéndum, o constituionalistas (PSOE, PP y C's), no llegan al 41%.


En el País Vasco, aquí, tenemos algo parecido o peor.
Los favorables a una consulta de autodeterminación suman 67,3 %.
Los constitucionalistas, PP, PSOE y C's apenas un 38, 7%.


Así son las cosas. Un Gobierno en solitario del PP no hará más que alimentar esta situación. No en balde el PP en estas comunidades autónomas es cuasi irrelevante, quinta fuerza en ambas.



Test de estrés de las líneas rojas

Pedro Jota Ramírez considera que nada ha cambiado el 26-J y que la investidura está tan lejos hoy como anteayer.
Aquí.

Tal vez tenga bastante razón: con las mismas líneas rojas del último semestre, ninguna investidura ni combinación saldrían, siquiera en segunda vuelta y jugando con abstenciones.

Las 6 líneas rojas básicamente son:

1. El PP no renunciará nunca a que Rajoy sea presidente y votará NO a cualquier opción que no sea ésta.
2. El PSOE no apoyará ni siquiera por pasiva al PP.
3. C's no apoyará un Gobierno encabezado por Rajoy.
4. El PSOE no aceptará apoyos de los independentistas.
5. C's no entrará en un Gobierno donde esté Podemos y viceversa.
6. Los independentistas catalanes no apoyarán a nadie que no les asegure un referéndum con fecha.

Con estas líneas, como digo, no prosperaría ninguna investidura.

Si se mantienen estas líneas rojas, no habría  pues Gobierno; así que sólo quedarían o bien nuevas elecciones o un Gobierno a palos de técnicos impuesto por Zarzuela.

De todas las líneas rojas, las que parecen menos imposibles de desaparecer son la segunda y tercera.
Veremos si el Comité Federal del PSOE ve la abstención como una opción razonable.
Veremos si Rivera se come sus palabras de veto a Rajoy, tal vez a cambio de una reforma de la ley electoral, que es la nueva línea roja desde ayer.
Y, sin embargo, resulta muy complicado que salten por los aires estas dos líneas rojas, porque han sido dos ejes de las campañas de PSOE y C' respectivamente.







Lo que pudo haber sido y la comprensión lectora

Nunca se sabrá cuánto ha influido el histórico Brexit en los resultados de ayer ( si tiene que ver con 700 mil votos más para el PP); tampoco qué habría ocurrido con una participación más alta que la peor de la historia (un millón largo de votos menos a Unidos Podemos que en diciembre).

Las encuestas ya se ha visto que no son fiables (las a pie de urna o llamadas "israelitas" son especialmente crueles, pues demuestran que mucha gente recién votada miente, o bien que están mal hechas, o ambas cosas; y, por tanto, deberían suprimirse: ¿qué se gana con intentar saber una hora y media antes los resultados que se sabrán al cabo de una hora y media después? Y más si encima te equivocas, ni te cuento...), así que sólo queda la foto finish de las elecciones.

No sólo no sabremos que habría pasado sin el Brexit, sino que hoy mismo el electorado votaría probablemente distinto si conociera los resultados de ayer, que no satisfacen a mucha gente.

Más aún: ¿cuántos se habrán arrepentido de no ir a votar de entre el 30 y pico por ciento de abstencionistas, por ejemplo?

Ahora les toca a los políticos leer los resultados.
Con los precedentes que tenemos y el déficit de comprensión lectora de que han hecho gala es como para ponerse a temblar.

El año de la marmota

Que no presida el futuro Gobierno Rajoy sería visto como una aberración y eso algo que el PP no toleraría jamás, después de los resultados del 26-J.

Pero Rajoy no irá a la investidura si no la tiene garantizada.

El PSOE no puede apoyar activamente al PP. Como mucho, abstenerse, pero a cambio de algo o por una motivo superior.
C's no puede apoyar activamente a Rajoy, pero tampoco abstenerse, salvo que obtenga algo grande a cambio. Para votar al PP, o  aun abstenerse, se le tendría que garantizar la testa de Rajoy y la reforma de la ley electoral, cosas que no querrá el PP (lo último tampoco el PSOE aunque no lo diga, con vistas al futuro y a volver al bipartidismo cuanto antes mejor).

Así las cosas, C's intentará volver a hacer de alcahuete entre el PP y PSOE con vistas a una Gran Coalición, pero lo hará poniendo una vez más sus condiciones: una agenda regeneradora y una reforma de la Constitución. Pero no encontrará voluntad de pacto entre PP y PSOE. Y esta vez su discurso buenista y dialogante no le reportará nada en términos de imagen pues fue su pactismo lo que le costó el 20% de los escaños...


No se descarta pues que se dé una situación como ésta:

Sí al PP: 137 +1 (CC) + 5 (PNV) = 143 síes.
No al PP: todos los demás, que sumarían: 85+72+32+17+2= 208 noes.
La abstención de C´s no serviría de nada: quedarían en pie 176 noes (y 32 abstenciones).
Sólo la abstención del PSOE desatascaría la investidura: 122 noes (y 85 abstenciones).
Complicado.

Queda una tercera opción extravagante: PSOE + Podem@s + C's  (189 escaños) con un programa de mínimos consistente en "todos contra Rajoy" y en reformar la ley electoral, pero renunciando Podem@s al referéndum en Cataluña y País Vasco.
Improbable con las elecciones vascas en otoño...

Resumiendo: o el PSOE se abstiene en favor del PP; o C's apoya al PP y se traga un sapo con cara de Rajoy; y a cambio le dan algo de calderilla.


Así la cosas, no se descartan nuevas elecciones o un Gobierno de técnicos forzado desde Zarzuela.

¿Les suena?





Las balsas de piedra

El discurso de Rajoy en el balcón de Génova: populismo typical spanish en la calle y un discurso huero y de vergüenza ajena. La corrupción en el PP ya no pasará más factura.
En Cataluña y el País Vasco la fractura se agranda... y pronto serán balsas de piedra, como el Reino Desunido.

Un país enfermito, en el que no hay salida racional.