miércoles, 24 de febrero de 2016

40 nuevos años triunfales

Dice Rivera, pomposo, que el acuerdo PSOE C's  firmado en el Congreso (?¿) inaugura, nada menos que "40 nuevos años de prosperidad para todos los españoles..." (sic). Y remeda frases de Suárez tipo "lo que demanda la calle ahora está en las instituciones...". Cosas de la posmodernidad, que pasa por el túrmix y lo degrada todo.

Dice Sánchez que suman y que quien no lo ve es que está ciego... sí, suman 130 diputados. y uno más con Coalición Canaria.
Es decir, apenas siete votos más que el PP. Con estos votos no van ni a la esquina.

Solo se entiende este pacto (de espaldas a Podemos, que está que trina, pues ellos siguen negociando en paralelo con el PSOE) si PSOE y C's piensan ir en coalición a las elecciones del 26 de junio. En éstas, parece improbable que logren más de 130 diputados.


PP y Podemos ya han dicho que nadie sueñe con que se abstengan ante esta coalición.

Esto no es ni un pacto de investidura, ni de Gobierno ni de nada. Darle una solemnidad de pactos de la Moncloa o rango histórico  base de parafrasear frases de Adolfo Suárez resulta penoso e infantiloide.

Rajoy se queja, con razón,  del que llama "pacto de salón o pacto publicitario" y de que los 5 puntos cardinales de la Kleine Koalition no preocupan en absoluto a los ciudadanos: desde luego suprimir las diputaciones no quita el sueño a nadie; y las ILP apenas han dado nunca nada palpable, y ninguna ha prosperado ni dado resultados tangibles, así que bajar el listón  de medio millón a un cuarto de millón de firmas el listón para presentarlas en el Congreso solo hará que abrir la vía a todo tipo de lobbys. La limitación de mandatos es impropia en un regimen parlamentario y no presidencialista. El fin de los aforamientos es algo que habría que modular, y lo único valioso de la lista es la despolitización del CGPJ.


Aquí alguien está engañado a alguien.





La RAE da el cante

El director de la RAE, hombre cabal por lo demás, se une a Merino y otros académicos y supuestos defensores de la lengua española en su campaña en contra de que la canción que represente a España en Eurovisión tenga una letra en inglés. Habla de complejo de inferioridad y de papanatismo ?¿.
Pinche aquí.
Resulta patética, acomplejada y de papanatas y trasnochada tal campaña de nacionalismo lingüístico rancio, pro no decir otra cosa: a la lengua española hay que defenderla en el sistema educativo en Cataluña,  por ejemplo, y en el mundo mundial promoviendo la buena literatura en ese idioma y mejorando la red de centros Cervantes, que deja mucho que desear; pero a Eurovisión se puede ir con una canción en inglés, como hacen y han hecho tantos países, con lenguas importantes como la alemana, italiana, etc.. Incluso la misma Francia, que cuida su lengua mil veces mejor que nosotros la nuestra, ha mandado alguna vez  a cantantes que cantan en inglés... por la sencilla razón de que el inglés es la lengua internacional de la música pop, rock, funk, blues, rap, house, hard, metal, etc. etc, es decir de todos los géneros musicales modernos y postmodernos, desde mediados del siglo XX.
Del mismo modo que Coixet o Amenábar hace muy bien en hacer, cuando pueden y les alcanza, películas en inglés, la representante española, que tiene un inglés estupendo dicho sea de paso, hace santamente cantando en la lengua de los Beatles si le peta y representar a España si la han votado y de  rompiendo con esa tradición no escrita franquista de mandar a cantores patrios solo cantando en la lengua de Cervantes, a quien nadie lee, por lo que dicen las encuestas del Ministerio de Cultura.

Menos samba y más trabajo, señores académicos de la lengua.



P.D.
La canción de marras fue elegida por los votantes y los jurados de acuerdo con una reglas claras y preestablecidas. Hay que respetar su decisión, que incluía la posibilidad de que la canción elegida no tuviera la letra en español.

Y  la canción no está nada pero que nada mal.
Pinche aquí y escuche. Lograda la puesta en escena belle époque del final del clip. 
Con algunos versos bastante afortunados, que superan al Porompompero, al Lalala o a las últimas canciones cantadas en la lengua de la RAE:

Los pongo en español para los señores académicos que me temo andan un pelín flojos de inglés.

"Conozco de memoria todas mis sombras
Y tengo luz en  mis muchas grietas
Más de mil heridas en las manos
De  las veces en que me enfrenté a ellas".