martes, 3 de mayo de 2016

Rien ne va plus

Iván Redondo, fino analista, sobre las futuras elecciones.
Aquí.
Hagan juego, señores, rien ne va plus!
El problema es la sensación de vivir colectivamente un día de la marmota, algo que puede desanimar a muchos de ir a votar, si bien a otros muchos, a la mayoría, el 80%, parece que el marmotismo les anima más bien a votar lo mismo, cuando lo lógico sería que, cabreados, cambiaran el sentido de su voto. Pero no.

La abstención será decisiva, dicen los analistas. Pero ¿a quién beneficia la abstención?
Aquí algunas pistas sobre la fidelidad con que cuenta cada partido.

Yo creo que beneficia la abstención a los dos primeros partidos, los de siempre, por el sistema de restos a que obliga la ley D'Hont. El asunto es que el segundo partido no es seguro que sea el PSOE.
Esta ley que combina la proporcionalidad con un premio a los más votados, y que tanta gente cuestiona, por injusta, pues un partido con casi un millón de votos (IU) obtiene 2 diputados y otro con un tercio de esos mimo votos puede sacar 6 en otro sitio (PNV), por ejemplo.
Lo llaman representatividad proporcional corregida.