sábado, 23 de enero de 2016

Pablo tergal, el animalista

Ana Romero de El Español, ha padecido hoy el sectarismo feminazi de Iglesias, cuando a éste le ha tocado la pleura con lo de coalación de perdedores y los diez mil del ala de Bruselas.
Llevar abrigo de piel, con lo que nos importan los derechos de los animalitos, es de ruso blanco, y por tanto... señora, al paredón.
Y ella le devuelve con garbo su veneno.
Aquí.

Iglesias, reencarnación de Rasputín en lo físico, es más bien en lo químico como el bolcho y Vicepresidente Beria.